Es muy sencillo, de modo que si tienes alguna reserva en relación a estos aparatos, no tienes por qué preocuparte. Sin embargo, ante cualquier condición médica lo aconsejable es que consultes con un profesional de la salud.
Para comenzar a usar el estimulador muscular eléctrico debes seguir los siguientes pasos:
- Es necesario que leas bien el manual de instrucciones que trae tu equipo.
- Verifica que el producto se encuentre en buen estado y que funcione correctamente al conectar los cables en cada canal de transferencia (algunos dispositivos son inalámbricos).
- Coloca los electrodos en la zona a la que deseas dar tratamiento, sea TENS o EMS, con una separación de 5 a 15 cm, de acuerdo al área que se va a estimular.
- Programa. En caso de que incluya programas preestablecidos debes optar por el que mejor se adapte a tus necesidades, pero si buscas una sesión personalizada, será indispensable que ajustes los parámetros según tus preferencias.
- Establece el tiempo de tratamiento e inicia la sesión.
- Al finalizar, apaga el aparato y retira los electrodos de forma individual.
- Guarda el dispositivo hasta tu próxima sesión.
Uso de electroestimuladores en el entrenamiento deportivo
La combinación de electroestimulador y ejercicio permite:
- Aumento del rendimiento
Aumentan el rendimiento deportivo, ya que contribuyen al fortalecimiento de los músculos y al desarrollo de la fuerza y la resistencia. Sus resultados son principalmente significativos en la zona de cuádriceps y biceps, siendo visibles por lo general en 3 o 4 semanas. En este sentido, son un complemento ideal para quienes practican natación, atletismo o deportes colectivos.
- Antes y después de practicar ejercicios
Calentar los músculos antes de hacer cualquier actividad física es importante para evitar lesiones, para ello se puede utilizar un electroestimulador con función EMS.
Asimismo, al finalizar la sesión deportiva, es recomendable efectuar estiramiento para relajar los músculos, y para ello los electroestimuladores son ideales, pues favorecen la recuperación al disminuir el ácido láctico.
- Fortalecimiento muscular
El principal objetivo de gran parte de los usuarios que compran un electroestimulador es para utilizarlo como máquina para descargar músculos, con el objetivo de tonificar y aumentar la masa muscular. En relación a eso, estos equipos suelen ser efectivos sobre todo en los abdominales, siempre y cuando se usen de forma regular y como complemento de alguna actividad física. Si tu objetivo es mejorar la zona abdominal, lo más óptimo es que compres el un electroestimulador abdominal como los de esta comparativa, ya que estos modelos están diseñados específicamente para este fin. También existen modelos especiales para otras zonas del cuerpo, que ofrecen un entrenamiento personalizado y completo.
Uso de los electroestimuladores en fisioterapia
En fisioterapia se emplea para la rehabilitación, la reducción del dolor, la recuperación de la forma física y la tonificación de los músculos después de un tiempo prolongado de inmovilización o una hospitalización.
Es muy frecuente el uso de estos equipos tras un accidente o traumatismo, pues se emplean con el propósito de recuperar el músculo adecuadamente evitando futuras recaídas.
Contraindicaciones de la electroestimulación
¿Tienes claro en qué casos no está recomendado el uso? Pues las máquinas de electroestimulación están contraindicadas en los siguientes casos:
- Arritmias o enfermedades cardíacas
- Embarazo (no debe aplicarse en el abdomen)
- Fiebre elevada
- Heridas superficiales
- Tumores
- Varices
- Trombosis
- Hemorragias
- Marcapasos
- Epilepsia
- Alteraciones de sensibilidad
- No debe colocarse en el trayecto de la arteria carótida
Medidas de seguridad al usar electroestimuladores
- Algunas máquinas de electroestimulación no están indicadas para la rehabilitación y la fisioterapia, sino que se encuentran diseñadas para personas sin problemas de salud. En caso de que padezcas alguna afección, es recomendable que consultes a un especialista, quien de acuerdo a tu caso te presentará un tratamiento con un estimulador que tenga las funcionalidades más adecuadas.
- No uses el aparato en lugares húmedos.
- Fija correctamente toda la superficie de los electrodos para terapia muscular sobre la piel.
- No coloques los electrodos sobre lesiones cutáneas o cerca de estas.
- No ubiques los dos polos (+ y -) de un mismo canal, a un lado y otro de la línea media del cuerpo, por ejemplo, pierna derecha e izquierda.
- No retires ni desplaces los electrodos durante el tratamiento de estimulación sin desactivar el aparato.
- Por motivos higiénicos, no uses los mismos electrodos en varias personas.
- No humedezcas los electrodos para terapia muscular en agua, ni les apliques disolventes.
- Realiza sentado o acostado los primeros cinco minutos de la sesión, pues no es aconsejable hacerlo de pie, ya que existen casos en los que algunas personas desarrollan sensación de debilidad, disminución de la presión arterial y reducción de la frecuencia cardíaca debido al temor a la estimulación y la sorpresa de observar la contracción involuntaria de uno de sus músculos.
¿Qué mantenimiento necesita un electroestimulador?
La mayoría de modelos a la venta para uso doméstico son automáticos y no necesitan ningún tipo de calibración o ajuste. El único mantenimiento que debes hacer es limpiar y guardar correctamente los electrodos y sustituir las pilas cuando éstas se agoten.