¿Cuáles son las causas de una mala postura?
El cuerpo humano está diseñado para ejecutar una infinidad de acciones en distintas posiciones, bien sea de pie, sentado, acostado, etc.
Cuando permanecemos mucho tiempo en una misma posición, los músculos y la estructura ósea se resienten y empiezan a doler.
En algunas ocasiones, las malas posturas están asociadas con enfermedades congénitas relacionadas con los huesos y músculos. Haber sufrido un accidente o recibido un golpe en la espalda o área lumbar también puede degenerar en una deformación corporal leve.
Sentarse mal
Las dolencias más comunes a nivel de cuello y espalda son producto de la mala postura que adoptamos cuando estamos sentados. Por eso es de vital importancia que uses una silla ergonómica, sobre todo si pasas mucho tiempo sentado por trabajo.
No solo tiene que ver con la cantidad de tiempo que pasamos frente a la pantalla, sino también con la ausencia de un asiento cómodo y ergonómico. Cuando ambos factores se combinan, es casi seguro que aparecerá alguna molestia en la zona de la espalda, hombros y cuello. Si quieres saber más, en este artículo explico cómo sentarse correctamente en una silla de oficina.
El sobrepeso
También el exceso de peso es un mal común que repercute negativamente en todo nuestro cuerpo, incluyendo los músculos y el sistema óseo.
El sobrepeso tiende a deformar los huesos, especialmente los de las piernas y la columna. En estos casos, es necesario acudir a un profesional médico para que prescriba el tratamiento más adecuado a seguir.
¿Cuáles son los beneficios de usar un corrector de espalda?
Gracias a ellos, es posible activar la memoria de nuestros músculos para que regresen a su posición natural. Además, la presión constante sobre las distintas áreas de la espalda fortalece la masa muscular haciéndola más resistente ante las malas posturas.
Asimismo, con un corrector de columna vertebral obligamos a nuestro cuerpo a permanecer erguido mientras ejecutamos tareas cotidianas, ya sea de pie o sentados.
El uso adecuado de un corrector postural no interfiere con el resto de actividades diarias. Al contrario, reduce paulatinamente las molestias y dolores generados por una mala postura, contribuyendo a nuestro bienestar.
La buena postura, la autoestima y la imagen que proyectas
Es un hecho que la postura de nuestro cuerpo es capaz de proyectar una imagen que los demás podrán leer fácilmente.
Una figura encorvada podría interpretarse como falta de entusiasmo e interés, desánimo o desaliento. Igualmente, esa misma postura podría incidir en nuestra autoestima, contribuyendo a que sintamos tristeza o pensemos negativamente.
Por el contrario, una postura erguida y con cabeza alta está directamente relacionada con un estilo de vida productivo, dinámico y optimista. Los correctores de espalda no solo mejoran la posición de nuestro cuerpo, sino que también refuerzan nuestra autoestima. Este es uno de los beneficios a medio y largo plazo más valorado de esta pieza correctiva.
La necesidad de usar un corrector de espalda
El cuerpo humano es una máquina que está diseñada para estar en movimiento.
Cuando adoptamos hábitos sedentarios o pasamos mucho tiempo sin darle movilidad a los músculos, estos se resienten, adormecen y empiezan a doler. Por el contrario, cuando hacemos ejercicios y llevamos una vida dinámica, el sistema muscular y óseo se fortalecen y ganan resistencia y volumen.
De hecho, está comprobado que la actividad física tiene un efecto muy positivo en nuestra autoestima y estado de ánimo. Basta con salir a correr una tarde para despejar la mente y regresar a casa con una actitud más positiva.
En otras palabras, mientras más nos movemos, más saludables, productivos y felices somos.
Es así como estamos hechos, pero, en el mundo de hoy parece que todo está diseñado para que nos movamos lo menos posible.
Son muchas las personas que pasan largas horas frente al ordenador o la televisión, ya sea por razones laborales o simplemente ocio. Recientemente, el estilo de vida se ha vuelto todavía más sedentario debido a la facilidad para teletrabajar o hacer compras por internet.
¿Cuáles son las consecuencias de adoptar una mala postura?
Cuando adoptamos una mala postura, nuestro cuerpo nos avisa causando dolor en el área más afectada. Si no le hacemos caso, termina por acostumbrase, doblegando a los músculos y huesos en una posición anormal. Esto puede generar graves consecuencias como las siguientes:
- La consecuencia inmediata de una mala postura es la presencia de fuertes dolores constantes en la espalda, hombros, cuello y cabeza. Y el problema se agrava cuando tomamos algún medicamento analgésico para mitigar el dolor, pues el cuerpo se acostumbra a la mala posición.
- Una mala postura mientras se ejecuta un trabajo que implique esfuerzo físico puede causar lesiones en las articulaciones y discos de la columna.
- Una posición encorvada puede empobrecer enormemente nuestra imagen, dando una impresión negativa sobre nosotros y nuestro estilo de vida.
¿Cómo corregir la postura de espalda y hombros?
En vista de la importancia que tiene conservar una postura correcta, tanto para la salud como para la imagen que proyectas, repasemos algunas medidas sencillas que puedes adoptar. Con solo corregir algunas malas costumbres y adoptar un par de buenos hábitos, podrás conseguir mucho alivio.
- Hacer ejercicio regularmente y a un ritmo moderado puede contribuir muchísimo a mejorar tu salud física, mental y emocional. Tanto los huesos como los músculos se fortalecen para ganar resistencia y no ceder ante una mala postura. Además, es la manera más eficaz de combatir un estilo de vida sedentario.
- Es importante que descanses lo suficiente, asegurándote de dormir correctamente y sobre un colchón cómodo y adecuado. De esa manera protegerás la espalda, los hombros y el cuello, además de aliviar los dolores y molestias musculares.
- Por último, recuerda que una dieta equilibrada contribuye a mantener a raya los problemas de sobrepeso y le dan a tus músculos y huesos los nutrientes que necesitan.
¿Cómo usar un corrector de postura de espalda?
Si es la primera vez que compras un corrector de postura, es comprensible que no sepas cómo usarlo. Además de seguir las instrucciones del manual de usuario que acompaña al producto, te será de utilidad recordar estas sencillas sugerencias.
- Determina cuál de las dos caras es la que debe estar en contacto con tu cuerpo. Amolda el diseño a tu tronco y verifica que quede ubicado correctamente en la espalda y los hombros.
- El segundo paso consiste en ajustar las correas lo suficiente como para que el no se mueva con facilidad.
- Ajusta ahora la faja alrededor de tu abdomen y asegúrala con el cierre de velcro. No aprietes demasiado, solo hasta que el corrector no se mueva.
- Realiza una serie de movimientos de prueba para asegurar que no haya quedado flojo ni se abra por sí solo.
- Es momento de que te pongas la camisa o blusa que usas regularmente y verifiques con la ayuda de un espejo que la faja no se note.
- Después de haberlo utilizado durante algunas horas o minutos (depende de la fase en la que te encuentres), libera las correas y procede a quitártelo lentamente.
- ¿Cuáles son las causas de una mala postura?
- ¿Cuáles son los beneficios de usar un corrector de espalda?
- La buena postura, la autoestima y la imagen que proyectas
- La necesidad de usar un corrector de espalda
- ¿Cuáles son las consecuencias de adoptar una mala postura?
- ¿Cómo corregir la postura de espalda y hombros?
- ¿Cómo usar un corrector de postura de espalda?
- Entonces, ¿funciona…? ¿Qué opinan los que ya lo han usado?
- Preguntas habituales
Entonces, ¿funciona…? ¿Qué opinan los que ya lo han usado?
Revisando las opiniones de los compradores, me he dado cuenta de que a pesar de que la calidad de los materiales y el ajuste puede cambiar de un modelo a otro (ej. aHeal gana en calidad), los usuarios siempre indican las mismas ventajas y desventajas de los correctores de espalda.
El principio siempre es lo peor. Prácticamente todos opinan que al empezar a usarlo puede molestar un poco, incluso hay gente que tiene agujetas. Pero es cierto lo que dicen algunos usuarios, y es que no es un producto para estar cómodo sino para corregir la postura.
Mucha gente admite que cuando lo compró no confiaba en que funcionase, aun así lo probó y se sorprendió gratamente. No es un efecto inmediato, sino que necesita tiempo para notar mejoría. Además, como advierten muchos, debes ir poco a poco, primero usarlo durante un rato corto al día, alrededor de 20 min, y cuando te acostumbres puedes usarlo todo el día
También comentan que al principio puedes necesitar algo de ayuda para colocártelo hasta que aprendas a hacerlo solo. Se ajusta bien, aunque la mayoría asegura que le molesta un poco en las axilas, porque para que funcione tienes que sentirlo ajustado al cuerpo.
Lo que más me ha sorprendido es que a algunas personas les va muy bien para problemas puntuales, para recuperarse del lumbago.
Preguntas habituales
¿Puedes hacer ejercicio con un corrector de postura?
No todos los correctores de postura son iguales, por lo que debes consultar la documentación del fabricante para saber si es apto para hacer ejercicio.
Dicho esto, hay ejercicios en los que un corrector de postura para espalda molesta menos, como el levantamiento de pesas, en el que puede ser incluso aconsejable el uso de correctores de espalda o fajas lumbares.
¿Cuánto tiempo puedo usar un corrector de espalda?
Depende del modelo que elijas. Algunos fabricantes aconsejan solo usarlo 2 horas al día y otros hasta 6 u 8. Eso depende de la calidad del material y de la sujeción. Lo más recomendable es estar alrededor de 4 o 5 horas diarias, porque tus músculos pueden acostumbrarse a tenerlo puesto y no ejercer la fuerza que deberían cuando te lo quites.